Los edificios inteligentes integran tecnología en cada rincón: sensores de clima, iluminación automatizada, cámaras inteligentes… y por supuesto, escaleras eléctricas. Lejos de ser sistemas independientes, hoy estas estructuras también pueden integrarse con plataformas centralizadas.
Las escaleras eléctricas modernas pueden conectarse con sistemas de gestión del edificio (BMS) para optimizar consumo energético, adaptarse al flujo de personas y detectar fallas en tiempo real. Esto permite que, por ejemplo, se activen automáticamente en horarios de alto tráfico o entren en modo de ahorro cuando el flujo baja.
Además, las escaleras eléctricas pueden integrarse a protocolos de evacuación, identificando su posición y estado operativo ante emergencias. Esta conectividad es clave en espacios de alto tránsito como centros comerciales o aeropuertos.
La integración no solo mejora la operación: también entrega trazabilidad. Cada revisión, ajuste o parada queda registrada. Así, las escaleras eléctricas se convierten en parte activa de la infraestructura inteligente.
En CONEKTA, trabajamos para que cada sistema —incluyendo tus escaleras eléctricas— sea parte de un ecosistema coordinado, eficiente y seguro. Porque moverse bien también es integrarse al futuro.